La seguía con mi mirada cada cosa que hacia, la quería cuidar en cada momento que yo estuviese con ella. La ayudaba con todas las cosas que hacia.
Sabia que ella de podía cuidar sola pero tenia miedo. Tenia pánico que algo le pase a ella o al nuevo bebé.
Quien iba a creer que estuviese embarazada después de casi 20 años.
-porque me miras tanto?-levanto su ceja y yo me apoye en la mesada observándola- Pedro basta-sonrió y se alejo de mí
-te estoy cuidando Paula-suspire y ella camino hacia mí
-tengo tanto o mas miedo que vos-me toco mi mejilla- un bebé ahora? Es todo muy loco, porque la verdad ya estamos mas preparados para criar nietos que hijos-le levante su mentón
-somos mayores, nuestros hijos ya pasaron su adolescencia-suspiré- aunque me duela sé que algún día ellos van a volar en busca a su destino , en busca de su verdadera felicidad-coloque mi mano en su abdomen- y capaz que él o ella llego para unirnos mas, para que no nos quedemos tan solos-me rodeo con sus brazos por mi cuellos y toco su nariz con la mía-
-te amo, no cambies nunca por favor-pegue mis labios con los suyos
-yo te amo mas-la abrace mas a mi cuerpo y la acerque a mi pecho- tenemos que celebrar esto-sonrió y le bese su frente
-mañana salimos con la eco en mano, mientras-se separo de mi-nada a los chicos -me señalo- de enserio Pedro-
-lo entendí señora Alfonso-sonrió y se miro el anillo, sabia mas que nadie que amaba que le digan señora Alfonso y encima le quedaba tan bien.
-bien en 5 comemos, anda a llamar a Balta-asentí y me aleje en busca de mi hijo mayor.
Baltazar era idéntico a mí y aunque yo me retiré del futbol, quedé como DT de las inferiores. Me retire en River y lo volvería hacer si fuera posible.
Hoy tuvimos un partido a beneficio, amaba colaborar con todo lo que podíamos, tanto yo como mi familia.
Ciro tiene una organización que rescatan animalitos que están en la calle y nosotros ayudamos en su lucha.
Subí las escaleras y escuche susurros, sabia que era Milagros con Balta, estaba seguro que le estaba narrando lo que paso en ese partido.
Baltazar estaba sacado con su hermano Ciro, por haber invitado a Ulises a jugar en nuestro equipo. La verdad no se porque se habían peleado pero se sacaron las ganas en la cancha. Baltazar le fue directo a él a pegarle en la rodilla pero Ulises se dio cuenta y lo que atinó hacer es ponerle la traba.
Lo que sucedió después es un terrible grito de dolor de Baltazar, me acerque para constatar que no había fractura y lo confirmamos poco minutos después, el medico lo ví y le receto reposo.
Por unos instante mi mente voló a aquella ves que yo sufrí un encuentro igual que el suyo pero en mi caso me hice bolsa la rodilla.
Por instinto me mire mi rodilla y acaricie la cicatriz que habían quedado de mis 6 puntos de sutura. Me acerque un poco mas y la intriga me invadió, estaban hablando y la puerta estaba entre abierta.
-por favor créeme lo que te estoy diciendo Balta-escuche como tenia su voz entre cortada y mire a mi hijo, sabia que él tenia que reaccionar en algún momento.
-que te crea?-levanto su voz- Milagros vos lo trajiste a ese idiota a mi casa, vos lo presentaste como tu pareja- ella se seco sus lagrimas-
-pensá Baltazar-ella le grito- si fuera mi novio no estaría detrás de mi en cada momento? No me llamaría para saber como estoy? No me traería a casa todas las noches que tengo que laburar? Si yo fuera tu novia, vos no harías eso?
-yo haría eso y mucho mas, te le juro-sonreí orgulloso, por unos minutos él estaba siendo sincero.
-por eso mismo-ella tomo su mano y Baltazar sonrió- él vino conmigo porque coincidimos en el vuelo pero no vino a Buenos Aires por mí.-la mire detrás de la puerta, que estaba diciendo?
-como que no vino por vos?-ella negó con su cabeza- entonces, no entiendo porque volvió.
-no tengo que decirlo yo-suspiro- no soy la indicada pero quédate tranquilo que yo no siento nada por él-ví como ella tiernamente acaricio su mejilla
-posta?-asintió reiteradas veces secando sus lagrimas, él llevo su mano a su mejilla y la acaricio- quiero que sepas que hace 5 años cometí el error de decirte una verdadera estupidez -vi como hizo una mueca pero se pudo sentar en la cama- yo sentía cosas por vos cuando tenia 15 años-sonrió- y me anime por todo cuando fuimos de viajes de egresados -suspiro- te confesé todo cuando me puse empedo pero era verdad lo que te dije esa noche-le acaricio su pelo- después paso lo que ambos sentimos pero cuando me desperté al día siguiente y te ví durmiendo en mi pecho, caí en la cuenta lo que había hecho. Básicamente nos criamos como primos y me sentí una mierda- ella tomo su mano, Baltazar quería decirle su verdad- discutimos, bah yo dice esa frase hiriente y cuando volvimos vos te fuiste. Te fuiste y no supe mas nada de vos porque no podía ni escuchar tu voz, me partía al medio- suspiro y agacho su cabeza
-en cambio yo le a taladraba la cabeza a tu hermana- rieron- en fin podemos volver empezar -le ofreció su mano- Milagros -él la tomo rieron
-Baltazar, un idiota que dejo ir a la chica de mi vida pero ahora va por todo- tomo sus mejillas y la beso. Yo sonreí como un padre baboso que era. Espero unos segundos mas y decidí tocar la puerta. Ellos garraspearon sus gargantas y Milagros se levanto de golpe.
-permiso -dije entrando- mamá dijo que bajen que ya esta la comida-Milagros agacho su mirada
-yo voy bajando mientras-paso por mi lado y yo sonreí.
-y??-dije volviendo mi mirada a la carita de enamorado de Baltazar
-y que papá?-se levanto de un salto y realizo una mueca- sigue el dolor- camine hacía él y le coloque la rodillera.
-bien el dolor ya esta, ahora que pasa con Milagros?-una enorme sonrisa apareció en su rostro
-ya sabes todo Papá -sonrió y me miro- confesé todo y…-se mordió el labio- nos besamos, fue algo maravilloso-lo abrace fuerte a mi pecho.
-me pone feliz que seas feliz- él también me abrazo.
Últimamente estaba muy sentimental por todo. Miles de cosas pasaba por mi mente. Balta de bebé y ahora estaba hecho un hombre. Un hombre feliz al lado de la mujer que amaba.
-papá estas llorando?- se separo de mí y sonrío- estas llorón papá-sonrió
-papá todavía no lloro lo que debía, espera que te contemos con tu madre la sorpresa, te morís -comencé a caminar hacia el pasillo- vamos que se enfría y tu madre va a poner el grito en el cielo.
-dame una pista?-dijo siguiendo mis pasos
-no puedo-escuche un largo suspiro y yo sonreí
- sos malvado -volví a reír porque obviamente no iba a abrir mi boca hasta que tengamos las pruebas en nuestras manos...
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