No me Olvides Capitulo 60

Hoy exactamente cumplen tres meses mis bebotes. Uuufff tres meses caóticos para Pedro y para mi. Tres meses cambiando pañales dobles, tres meses dando tres mamaderas diarias doble, tres meses dando pecho, tres meses de llantos, tres meses de coas, juguetes por todos lados, comida por todos lados.

Tres meses llenos de amor, llenos de caricias, llenos de sonrisas, llenos de risas, esas risas que con solo escucharlas te contagian y pensar que esas dos personitas que vinieron a nuestro mundo fueron hecha con tanto amor.

Pedro esta completamente embobado por nuestros hijos. Cuando Pepe jugaba en el exterior, se tomaba el primer vuelo y volvía con nosotros. No podíamos separarnos ni por un día.

Yo no podía volver a trabajar porque no me podía dejar a mis bebes. Estaba sola porque Pedro no queria a Sara en nuestra casa, la verdad que siempre tuve la duda.

Pedro se hizo muy amigo de un papá que estaba en la clinica. Él hace menos dos meses quedo como guardaespaldas de la familia. Tiene una beba siete mesina y yo con mucho placer me hago cargo de Milagros. Los gemelos la adoptaron como una hermanita mas, esta viviendo con nosotros, bueno en el mismo terreno porque le armanos una casita en el fondo con toda sus comodidades que necesitan. Me encariñe rápido de Milagros, tiene una mirada morfable. Mi hermana la ama, ella anda con los tres para todos lados, no hacemos diferencia alguna.

Hoy era mi primer salida con ellos dos. Hacia mas de cinco meses que no volvía a Lobos. Necesitaba ver a mis amigas y a mi familia. Extrañaba tanto mi barrio.

Baje con tres bolsos lleno con ropa de mis bebes. Siii, lo se, soy una exagerada totalmente, pero por día maso menos los cambio unos cinco veces, así que llevo una enorme mudas de ropa.

Deje los bolsos en el sillón y camine hacia el comedor. Allí estaban mis dos hijos, mi futuro marido, Julian y su hija tirados en el suelo. Habíamos armado una sala blanda para que ellos puedan jugar libremente sin golpearse.

Me sume a ellos y enseguida mis hijos se peleaban por mis brazos.

-no se vale, cuando mamá no estaba se peleaban por mi -Pedro se cruzo de brazos-

-cosas que pasan Pedro -rió Julian- menos mal que no paso por eso.

-te equivocas porque esta pequeña -le bese la cabesita de Mili- imita todo lo que hace los otros dos -reimos porque la verdad era cierto. Andaban los tres juntos, sabia que iban hacer una hermosa amistad-

-bueno salis algun lado hoy? -dijo Pedro parandose y agarrando un vaso de agua de la mesa, asentí-

-ya te dije hace dias Pedro -suspire- vamos a lo de mamá, hace una semana atrás me dijiste que también ibas a ir con nosotros -negó- porque?

-primero porque me olvide absolutamente, segundo no dormí nada, estoy devastado mental y físicamente y por ultimo se me parte la cabeza. Te jode mucho que me quede? -negué con mi cabeza-

-queres que le suspenda a mamá? -me pare a su lado y le toque la frente- tenes fiebre Pepe -cerro sus ojos- mejor le voy a decir que no vamos -quise caminar para agarrar mi teléfono pero Pedro me agarro de la mano y me llevo hacia su pecho.

-no vas a llamar a nadie -me saco mi pelo de la cara y lo llevo hacia atrás de mi oreja, sonreí- te vas a ir con los bebes y yo me voy a quedar a descansar. La verdad me gustaría ir pero se me parte la cabeza. -asentí y le di un beso-

-estas seguro? Sino nos quedamos y te cuido -rodeo mi cintura y paso su nariz con la mía, un beso esquimal, lo amaba-

-tan seguro como que te amo -nos volvimos a besar y un leve garraspeo de una garganta se escucho de fondo, pero suspiro- no podes bancar un poco Julian? Estoy enfermo -reímos y yo me separe-

-no quise interrumpir la hermosisima escena pero no los podía manejar mas, la verdad no se como hace Pau para estar con los tres a la ves. Yo no puedo todavía con una -reimos, era tan sincero Juli-

-bueno -agarre a ambos bebes en mis brazos y los guie hacia el sillón- se van a quedar aca hasta que mamá arregle algo y vamos a la casa de la abuela si?? -sonrieron, la verdad sabia que entendían perfectamente- Pedro -grite, en minutos lo tenia a mi lado con Mili en sus brazos, la agarre y la senté al lado de mis terremotos- Julian -volví a gritar, él vino mas tranquilo a mi lado, super relajado con una mamadera en sus manos- no hace falta, ya se la di yo -suspiro y la dejo en la mesa- sabes que eso va … -me interrumpió-

-en la heladera, lo se mujer -grito Julian y con Pedro reímos, en minutos volvió y se sumo con nosotros- mande señora.

-te quedas 5 minutos con los tres? -lo mire dudar pero asintió- voy a darle algo a Pedro y me voy.

-se van -dijo Pedro- ya hable con Julian, él te lleva y él te trae. Yo me quedo con Mili mientras él vuelva a casa -negué con mi cabeza- ya esta todo dicho Paula.

-no hace falta que te quedes con Mili, mi mamá la quiere ver y si Julian no le molesta yo me encargo de ella.

-no hace falta Paula -dijo Julian tímido- la verdad ambos hacen mucho por nosotros -se sentó al lado de su hija y ella enseguida trepo a sus piernas-

-lo hacemos porque la verdad te queremos -dije emocionada-

-y sos parte de mi familia, de nuestra familia Julian -dijo Pedro rodeándome por detrás con sus brazos sobre mi panza, me beso mi cuello-

-bueno, anda a darle a Pedro lo que le tenes que dar -me guineo el ojo- mas que seguro que es mas de cinco minutos -rio-

-Julian -gritamos tanto Pedro como yo, nos miramos los tres y reímos.

-solo voy a darle algo para la fiebre y nos vamos.

-mientras tanto voy acomodando a los tres terremotos en sus huevitos y subo los bolsos -se levanto y agarro los tres huevitos para poder a los bebes-

-tene cuidado, ya bajo. -asintió-

-cuidalos- le advirtió Pedro- ahora y siempre okey?

-si crack, doy mi vida por ellos pero vos por la mia también colega.

-siempre amigo -se abrazaron y se dieron unos cuantos golpes en sus espaldas. El típico abrazo de machos, según ellos y subí con Pedro a nuestra habitación.

Le di una ibuprofeno y le dije que si sentía mal que me llame que en seguida volvía. Me dijo que no me preocupara que él solo necesitaba descansar. Después de unos cuantos besos y mimos baje directo a la camioneta, los tres ya estaban en sus asientos con un juguete cada uno.

-todo bien? -me pregunto Julian.

-si, va a estar bien, lo se. -salimos rumbo a mi casa que fue durante mi adolescencia. Como extrañaba tanto.....



-

Estaba hecho bolsa, no había dormido nada y encima un día antes había jugado con un equipo que nos cago a patadas. Una de ellas fue hacia mi rodilla lastimada y por cierto estaba latiendo hasta no poder.

El medico del club me dijo que fue solo un golpe tonto, que no me haga problema, pero tenia que hacer reposo. Por eso me quede en mi casa y mas que nada porque se me partía la cabeza.

Baje por un vaso de agua y volví a acostarme en mi cama, hecho una bolita en un costado. Estaba solo, tenia toda la cama para mi pero ya era la costumbre que tenia. Pau ocupaba toda la cama y a veces traía a los bebes con nosotros. La verdad que amaba dormir con ellos. Yo tenia a Olivia en mi pecho muchas veces y Balta con Pau.

Me tome otra pastilla porque no me pasaba ninguno de los dos dolores y me acomode para dormir, por lo menos unas horitas, si se me pasaba me iba para Lobos, porque la verdad también extrañaba.

Unas horas después me sobresalto al sentir que me abrazaban por mi espalda, la verdad no tenia ni ganas de abrir mis ojos. La pastillas que había tomando tenia tranquilizantes, así que con las dos pastillas que me tome, me habían hecho efecto.

-pensé que ibas a tardar mas -dije y ella solo me beso en mi nuca- vamos a dormir un rato mas. -me rodeo mas mi cintura y me volví a dormir-



-

Llegamos a la casa de mis viejos y la verdad que tanto mis hijos como Mili iban pasando en brazo en brazo. Con Julian miramos la escena en un costado y después me lo lleve hacia la cocina.

-cafe?? -asintió- sentate, sentite como en casa.

-tu casa Paula, estoy viviendo de prestado -se sentó- te juro que apenas junte algo mas de plata me voy con Mili-

-no vas a trabajar mas para nosotros? -le di una taza y después me senté frente de él-

-si, voy a seguir. Buscare una guardería para Mili así las horas que no la tengo trabajo -negué con mi cabeza-

-de ninguna manera. Milagros la amo tanto como mis hijos, no quiero separarme de ella. No nos hagas esto Julian.

-hicieron muchas cosas por nosotros, no se si merecemos tanto. -le tome su mano-

-las cosas buenas siempre le pasan a las personas humildes y si Pedro se le metió en la cabeza que estés cerca de nosotros es por algo. -me tomo mi mano-

-sos una exelente mujer y madre. Sos de otro planeta Paula. -sonreímos- gracias por ser una madre para Mili, en esta etapa de su vida necesitaba una. -suspiro-

-y la enfermera? -reímos- seguís? -negó- porque? -tomamos ambos un trago de café-

-no se, todo iba bien pero le dieron vacaciones y se fue. No podía decirle que se quede, aunque me lo propuso, capaz quien dice que cuando vuelva podamos … no se intentarlo.

-claro, porque no?

Seguimos charlando hasta que mi mamá junto a mi papá entraron con los tres en sus brazos. Charlamos de todo un poco y yo cada rato constataba mi celular para ver si Pedro había escrito algo, pero como no tenia nada me volví a concentrar en la charla.

Comimos todos, porque mi mamá de tanto insistirle a Julian que se quedara tuvo que hacerlo. Cuando terminamos caminamos todos hasta el living.

-Pau perdón que me meta pero le trajiste las vitaminas a Oli? -me pregunto Julian. Olivia desde que nació le tenia que dar unas vitaminas que parecían jugo y ahora que es mas grande le hacia mas falta. Era como potacio, como el día que nació prácticamente estuvo muerta unos minutos, Esteban me recomendó que le empiece a dar hasta los primeros días de edad.

-las vitaminas -me altere- me quiero morir-

-hagamos una cosa las voy a buscar -se levanto-

-no -grite- dame las llaves voy yo y de paso me fijo de Pedro -asintió y me tiro las llaves- quedate aca con mi mamá.

-seguro que no molesto Alejandra?-pregunto tímido-

-nooo para nada, veni nene -se lo llevo al sillón- enseguida llega Gonzalo asi te divertís un poco y no ves toda cosas de bebes todo el tiempo -sonreimos-

-ya vuelvo- todos me dijeron que lo tome con cuidado y salí rumbo a mi casa.

Tenia como una hora de tiempo en llegar... bastante tiempo, solo de pensar que por estúpida no agarre las vitaminas. Si sabia que es lo primero que tenia que poner en su bolso.



Llegue con 15 minutos adelantado, salí y entre a mi casa. Corrí las escalera y vi que la puerta de la habitación estaba entre abierta pero no entre. Primero me dirigí a la habitación de Olivia y saque un frasquito de sus vitaminas, la guarde en mi bolsillo y camine hacia mi habitación. Cuando abrí la puerta mis piernas fallaron, me agarre del marco y no podía creer lo que estaba viendo. No, no podía a hacerme esto, Pedro no es así. Suspire, tome aire y la bronca me estaba haciendo hervir mi sangre. Esto no se le voy a perdonar.

-¡¡me podes explicar que carajos significa esto Pedro Alfonso !! -grite con toda mi bronca, abrió sus ojos y me miro con una sonrisa pero cuando miro a su costado salio rápido de nuestra cama-


Pedro, mi futuro marido me había cagado con una minita en nuestra cama.